Carolina Diaz Collados

Mis pacientes son mis verdaderos maestros, la práctica clínica me ha dado el matiz que no se encuentra en los libros y que nadie puede explicarte. Ese saber hacer y ese saber no hacer, ese saber escuchar lo que se dice pero sobretodo lo que no se dice.
No tengo mis títulos colgados en la pared de mis consultas porque no creo que el verdadero saber esté en lo académico sino en la experiencia. Es cierto que todo ese saber respalda mis intuiciones y me da herramientas para tejer ese traje a medida para cada uno de mis pacientes, pero la magia que surge en cada sesión nace de la conexión. Tu confianza en mí no va a surgir de la colección de títulos que pueda tener sino de tu sentir hacia mí y de la relación que vayamos estableciendo.
Pero si te interesa conocer mi camino profesional y el abanico de técnicas con las que trabajo aquí tienes mi historia:
Mi historia profesional
Cuando todavía estaba en mis últimos años de universidad ya entré como observadora en la Fundació Puigvert, en el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona asistiendo a sesiones clínicas y ayudando en procesos de investigación. Seguí con la residencia clínica en la Puigvert donde me formé como psicóloga clínica y psicoterapeuta, aprendiendo de grandes maestros como Lluis Farré, Montserrat Martínez del Pozo y Nuria Camps. Fue en esta etapa donde me empapé de la mirada psicoanalítica guida por grandes autores como Wilfred Bion, Melanie Klein, Donald Meltzer, Winicott entre muchos otros. Y donde aprendí de mi propio análisis durante 6 años.
Ya durante mi residencia en la clínica sentía q la palabra no siempre era suficiente, hay conflictos que nacen en la época pre-verbal y el trauma deja su huella en el cuerpo y la palabra no tiene la fuerza suficiente para borrar esa huella ni para llegar a esos estadios del desarrollo, así que compaginé mi residencia con un máster de análisis psicocorporal interactivo con Ángel Bonet donde aprendí a desbloquear tensiones musculares liberando los conflictos emocionales subyacentes y integrándolos después con un trabajo analítico. Aprendí de autores como Wilhem Reich, Alexander Lowen, Françoise Mezières y Carl Gustav Jung, entre mucho otros. Un trabajo precioso del que guardo grandes recuerdos y casos para recordar!
Y de lo corporal y lo psicoanalítico salté a lo grupal formándome como grupoanalista con el máster de psicoterapia analítica grupal de la Universidad de Deusto mientras trabajaba en un servicio de psicoterapia para adultos en la Fundació Sant Pere Claver, porque hay aspectos del ser humano que sólo se ponen en evidencia en contextos grupales y no en la relación individual. Fue un proceso personal interesantísimo que además compaginé con mi maternidad, quedando en mi un recuerdo muy dulce y familiar de aquella época.
Durante mi maternidad leí cientos de libros sobre parto y crianza natural pero nada como la propia experiencia para aprender lo que significa ser mamá y para aprender de tus propios hijos, auténticos maestros. Mi propia maternidad fue la que me ayudó a comprender y a acompañar a tantas mujeres en el mismo proceso. Después llegó mi separación y de nuevo fui sumando experiencias personales que más adelante me ayudarían a poder acompañar a tantas parejas en procesos similares. Fue justo en este catacreck cuando, movida por mi propia necesidad, empecé a probar como paciente las muchas técnicas en las que me iría formando después. Y es que no trabajo con nada que no haya experimentado yo primero. Así fue como llegué a Maruxa Hernando para aprender TIC (Técnicas de Integración Cerebral) y SHEC (Sincronización de Hemisferios Cerebrales) para procesar traumas. Con ella aprendí cómo el trauma queda registrado en el hemisferio derecho del cerebro y cómo al integrar ese recuerdo con el hemisferio izquierdo se puede transformar el trauma en aprendizaje. Después seguí con ICV (Integración del Ciclo Vital) con Yolanda Calvo también para procesar traumas y fortalecer nuestro sentido del yo con la ayuda de la línea del tiempo y la visualización.
Estuve en el Monasterio de Sant Benet en Montserrat para aprender EFT (Emotional Freedom Technique) con Teresa Forcades y descubrir una técnica energética para liberar emociones y aliviar dolores y Focusing con Maria del Mar Albajar para trabajar emocionalmente desde la consciencia corporal conectando con nuestra sabiduría interna.
Cursé el Practitioner y el Máster en PNL (Programación Neurolingüística) con Robert Long y Sol Martínez de quienes aprendí decenas de técnicas súper interesantes y efectivas entre las que destaco la línea de la vida y la integración de polaridades, recuerdo la experiencia de aprendizaje profundamente enriquecedora a nivel personal.
Aprendí Mindfulness con Soledad Calle y me adentré en el Análisis Transgeneracional de la mano de Meritxell Massachs.
Hice los dos primeros niveles de Integración de reflejos primitivos con Eva y los dos primeros niveles de Touch for Health, kinesiología básica con Teresa Mestres.
También hice mis pinitos en la Astrología psicológica con Andrés Zuzunaga pero la numerología acabó enamorándome, así que me formé con Martine Coquatrix en Numerología evolutiva, aprendí de Salomon Sellam la numerología en base 22 y estoy profundizando en numerología tántrica de la mano de Maria Lapuente.
En el máster en Psicosomática Clínica y Humanista con el Dr. Salomon Sellam aprendí las claves para biodescodificar los síntomas corporales aprendiendo así a leer el valioso mensaje que trae cada enfermedad y cada desequilibrio físico.
Y como esto del saber es un viaje sin fin y tiene el efecto de abrir más y más ventanas hacia ese horizonte inalcanzable, sintiendo que cuanto más sabes, más sabes todo lo que te queda por saber pues ahí sigo en mi andadura de descubrimiento totalmente fascinada con los resultados de la homeospagyria, y formándome en Yatromatesis con el Dr. Carlos Avilés. Una medicina holística que contempla al ser humano en todas sus dimensiones y que logra recuperar la salud de forma armónica y sin efectos secundarios gracias a unos complementos alimenticios elaborados con la técnica Homeospagyrica que entronca con la Tradición de Occidente que heredamos de Hipócrates y Paracelso.
Y hasta aquí lo andado hasta hoy y disfrutando de la incertidumbre de lo que vendrá, a sabiendas que todo porvenir será para un crecimiento mayor.
Feliz por dedicarme a lo que me apasiona y a lo que me ayuda a crecer, sabiendo que junto a mi crecéis vosotros también.